Planetas, arquetipos, personalidades, símbolos. Cada signo zodiacal es el resplandor de una energía totalmente diferente que mueve la vida en el universo. Por eso hay nativos diplomáticos, cambiantes, conservadores, etc. Esto nos evidencia una verdad cósmica totalmente real: Cada signo zodiacal tiene un significado en el existir, en el universo. Veamos cual es la significación mágica de cada uno.
Todos los signos guardan una clave importante para vivir
Iniciando con Aries, es imposible no reconocer que en ellos está el mensaje cósmico de la voluntad. Sus instintos impulsivos solo son una representación de la energía creadora del movimiento. Esto queda claro en su símbolo: el cabrito. Por su parte, Tauro no es más que una escultura a la permanencia. Su espíritu de supervivencia es quizás el más pronunciado de todos los signos. Esto también es indicio de fortaleza, pero no una dañina sino más fin protectora y a eso se refiere el Toro de Creta. Por su parte, Géminis es la comunicación humanizada, factor que conspiró para la construcción universal. Contrario a lo que piensan mucho, la dualidad de este signo apunta al encuentro versátil y no, a un patrón de bipolaridad.
Por su parte, Cáncer representa los cambios emocionales o internos, importantes en el equilibrio de la existencia. Por ello, su astro regente es la luna, cuyas fases gobiernan las fuerzas naturales del mundo y las mantienen en equilibrio perfecto. Por su parte, Leo representa la dirección y la verdad propias de la estrella mayor, el sol. Por eso son como reyes que actúan y lideran a otras personas. Lo más magnánimo de la existencia viene de esa fuente de poder inagotable. Por su parte, Virgo nos invita a creer en nuestro “sexto sentido”. Lo que podemos ver no es lo único que forma el campo de la realidad. Por supuesto que Virgo es el signo de la intuición y las conexiones espirituales que son también energía viva.
Cada signo zodiacal representa una energía necesaria para la creación
Libra es un signo que contiene la fuerza del equilibrio. No es fácil, pero el universo ha conseguido formas de mantenerse constante mediante la equiparación. A veces extremistas y otras veces juicioso, los hijos de la balanza buscan siempre la estabilidad. Por su parte, Escorpio tiene dentro de sí la energía poderosa de la atracción. Esa que de alguna forma permite que los planetas no choquen, conservando un orden armónico. Por ello, tanto la sensualidad como lo religioso tienen cabida en los regidos por Plutón. Entre tanto, Sagitario emana la energía pura del pensamiento, como prueba de que el pensamiento es la expresión más pura de existencia. La energía creadora por excelencia tiene en Júpiter su planeta regente.
Capricornio representa todo aquello que tiene que ver con sala rigidez constructiva: vigilancia, perseverancia y disciplina. Por eso, se considera que este es uno de los signos más evolucionados de la rueda zodiacal. Por su parte, Acuario es la energía creativa en sí misma. Para poder avanzar siempre debe haber un momento creador como lo fue por ejemplo, el “big bang”. No siempre existe un procedimiento para hacer las cosas, por ello estos amigos nos enseñan a que hay que buscarlo. Para finalizar, Piscis contiene la energía de la unión, mediante el apoyo, la consideración de los sentimientos y el respeto. Por donde corre, el agua no se opone sino que se adapta los espacio pero sin perder sus propiedades.