Con seguridad, en algún momento nos hemos preguntado esto ya que se trata de dos palabras que asociamos a la buena fortuna, pero, ¿sabemos que en realidad tienen significados diferentes, aunque su función sea prácticamente la misma? Los amuletos podemos definirlos como cualquier objeto que tenga una forma original o que de alguna manera se haya preparado de forma artesanal con piezas antiguas y que luego se haya cargado de energía por cualquiera de los métodos tradicionales y es para prevención y cuidados. El Talismán por otro lado si bien tiene la misma concepción, ha sido pensado para atraer la buena fortuna.
Diferentes épocas, pero la misma función: cuidarnos
Tal como dijimos, cualquier objeto puede ser adoptado como amuleto o talismán, en nuestra cultura muchos creen en las patas de conejo, en las herraduras o en los tréboles de cuatro hojas, pero pueden ser también piedras que tengan un significado para cada persona. Si hablamos de épocas donde se conocieron estos elementos, podemos decir que los amuletos son más antiguos y desde tiempos inmemoriales las diferentes culturas han usado gemas o piedras preciosas o no, como instrumentos para proveer de protección, paz, energía y poder pero también para el conocimiento.
A diferencia de estos, los talismanes llegaron a las culturas posteriores donde las mismas tuvieron en cuenta otros factores para confeccionarlos, como por ejemplo el movimiento de los astros en el cielo, los dioses y diosas y hasta los días del año. Los talismanes debían ser confeccionados con materiales más valiosos, como los metales preciosos de plata y oro o incluso con las gemas más preciadas y exóticas. Algunos estudiosos mencionan que la palabra en sí deriva de un vocablo árabe muy antiguo, tilism, que significa atraer la buena suerte para la vida.
Representación de amuletos y talismanes en las religiones
Para algunas religiones, estos elementos tienen un significado muy especial y particular y cada una las define según sus creencias, como pasa con las piedras que en algunos casos identifican a ciertos santos o dioses. A modo de ejemplo de las piedras que aparecen en estado original, bruto, son las que se adoptan como amuletos ya que, así como se toman se les da esa energía necesaria para que nos cuide, nos proteja. Muchas personas duermen con ellos a su lado y los llevan a todas partes porque les da seguridad y esto es muy cierto.
En el caso de las piedras que ya han sido talladas o incluso engarzadas, estas ya se consideran talismanes. Y es que muchas personas los utilizan para alcanzar ciertos objetivos que en primera instancia aparecen como muy difíciles, pero que se convierten en más alcanzables por la magia de estos talismanes. Pero no esperemos que nos caigan cosas materiales de arriba, estos objetos funcionan más que nada en el terreno espiritual, ayudándonos en nuestro desarrollo personal y en las mejores energías. También existe la medicina alternativa con piedras como la gemoterapia que nos ayuda a estar mejor, a sacarnos de encima las malas vibras y a vivir bien.
