Virgo es el signo de la estabilidad y de las cuentas claras. El más ecuánime de los signos de tierra, tolerante pero a la vez crítico y suspicaz. Pragmáticos, meticulosos y analíticos están siempre buscando su manera de hacer las cosas, viendo todo al detalle para que no se le escape nada y no quede nada librado al azar.
Ellos verán fácilmente lo bueno y malo que hay en ti de una forma casi intuitiva y con una sola mirada ya que tienen esa capacidad de descubrir lo que pasa en las personas sólo teniendo unas palabras con ellas. Necesitan pisar firme y esto es lo que les genera una verdadera tranquilidad emocional. Lentos pero seguros, aprecian las relaciones amorosas y de amistades largas forjadas con el tiempo, el cariño y las experiencias. Más allá de lo difícil que sea la convivencia, si se mantiene a través del tiempo para ellos es excelente. Esto les permitirá confiar y entregar todo lo bueno que tienen.
Empatía total
Lo regidos por la sexta casa zodiacal siempre apreciarán estar seguros. Así que por lógica, son sus compañeros de tierra los que les ofrecen mayor seguridad, confianza y estabilidad. Estas relaciones son idóneas porque entre iguales se entienden. Hablamos de Tauro y Capricornio, de los cuales el toro es el mejor candidato. Ambos son amantes de la fidelidad, la lealtad y de lo que perdura con el paso de los años. La seriedad en el nexo será su principal motor, siendo compatiblemente celosos el uno con el otro. Luego existen otros signos con los cuales puede haber bastante posibilidad de congeniar.
Un ejemplo perfecto de esto es Cáncer, con su necesidad de conseguir caminos rectos a sus metas para dejar de dar vueltas. Un virgo será el sustento perfecto, el mapa, la guía y el enfoque de los cangrejos. Este tipo de sociedades son beneficiosas para empojar las grandes metas de los Cáncer. Con Escorpión hay algo de chance debido a la predisposición que tienen los virgos para ser leales de forma indiscutible. Al Escorpión le encanta que sedan ante ellos y que todo se haga en los tiempos que quieren. Esto traerá a la larga algunos choques pero hay ciertas posibilidades. Con piscis el respeto y la cooperación se impondrán, estableciendo grandes sociedades que comparten ciertos intereses mutuos.
Con quien no se junta Virgo
Sagitario es sin duda la peor opción para un Virgo. La repelencia entre ambos caracteres es casi instantánea. El problema es que los sagitarianos son los más infieles, inestables y aventureros del zodiaco. Virgo no puede tolerar tanta libertad, o más bien, libertinaje. La inestabilidad sería mortal para los de tierra y tanto pragmatismo es algo incomprensible para los sagitarianos. Uno está en el aire y el otro pegado a la tierra. Con Acuario tampoco hay conexión debido a lo complicadas y etéreas que son estos acuáticos. Aunque la verdad es que pocos signos entienden la dulce locura de los acuarianos. Firmeza, estabilidad y definición son fundamentales para Virgo.
